lunes, 13 de junio de 2011

Deslógica manicomial I




Como en cualquier paso de tierra, uno mira y está el amor.

El amor que nunca es igual, y de alguna manera, se repite sin saber.
¿Por que no habría de pasar allí, en los acilos de estos ordenadores?

Bajo los árboles enamorando la sombra del invierno, se besan esos locos sin miedos,

Recorren sus manos como dos alfombras de nilón. Se ríen.





No hay comentarios:

Publicar un comentario